Conociendo a Carmelo Ruiz
A sus 50 años, tras darnos la entrevista se casca 50×50 de natación para preparar su 18 IM Lanzarote.
Carmelo Ruiz, nacido en Telde, Gran Canaria, comenzó a hacer deporte desde la niñez, en la que practicaba el surf, como casi todos sus amigos de la playa. De ahí se pasó al triatlon debido al auge que comenzó a tomar el IM de Lanzarote en las islas. Hemos podido entrevistarle, alucinados por su dedicación en uno de los Campus invernales.
Como te iniciaste en el triatlon
En 1993 trabajaba en Lanzarote, y pude ver el desarrollo de la segunda edición del Ironman, entonces yo había abandonado la práctica deportiva y contemplar aquel espectáculo me motivó a probar al año siguiente. En 1994 competí por vez primera en el Ironman.
Pionero de los primeros Lanzarotes ¿ como eran aqullas primeras ediciones en cuanto a los participantes ?
La principal diferencia viéndolo desde fuera es el número de participantes. Entonces competíamos unos 400. A nivel de motivación de los participantes, creo que la principal diferencia era que ahora la gente compite, entonces era una aventura personal frente a la distancia y los elementos. La mecánica de la bici, la calidad del asfalto de las carreteras, el material, eso también ha sufrido un cambio drástico.
Y anivel de prueba ¿ como ha evolucionado en estos 18 años ?
La prueba ha evolucionado en todos los aspectos, sobre todo a nivel técnico, los materiales han evolucionado mucho y también los métodos de entrenamiento. A nivel español, la participación ha aumentado exponencialmente, en el II Ironman de Lanzarote al que asistí como espectador solo pude identificar a un español.
Cuando te clasificaste para Hawaii y que sentiste, ¿ era tu sueño ?
Me clasifiqué en 2001, en día de vendaval, durísimo. Me había preparado muy bien, siguiendo la dinámica del año anterior. Fui 4º de mi grupo de edad, de 35 a 39, y realicé el 20º mejor parcial absoluto a pie. Sentí una gran realización personal, ya que lo perseguía desde años atrás y además toda mi familia estuvo ese día en la prueba siguiéndome, además de mi entrenador. Fue un sueño no solo deportivo, sino vital, alcanzado.
Hablanos del invierno en las Canarias, primero los guiris ahora también españoles, que opinas de esta evolución
Es una evolución natural, la cultura deportiva ha evolucionado en nuestro país, y si antes solo eran los extranjeros, ahora tambíen los profesionales y grupos de edad españoles vienen a Gran Canaria a entrenar, porque aquí tenemos el mejor clima y mejores rutas para entrenar en invierno. Además, ahora los españoles no tienen nada que envidiar a los extranjeros y ya son vanguardia en el triatlon mundial.
Después de tantas ediciones ¿ que motivación tienes en cada IM Lanzarote ?
La superación personal, continuar a mis 50 años superándome día a día, encontrar nuevas motivaciones y sensaciones, ayudar a todos aquellos que llegan y quieren probar y competir en la distancia Ironman, como ahora en el Campus TomTom Dorsalcero, y soñando con encontrar ese estado de gracia en mi próxima competición.
Hablamos ahora del triatlon canario, de aquella época de las Kikis y los Carmelos ahora hay más, incluso cracks formados en las islas
El triatlon canario ha evolucionado en proporción a cómo lo ha hecho tanto el Ironman de Lanzarote como el propio triatlon español, y teniendo en cuenta la bondad del clima y la calidad del deportista canario, no era extraño esperar esa evolución.
Por otro lado si que echo de menos que en la Isla de Gran Canaria no haya una prueba de Larga Distancia, máxime cuando este año ni siquiera se ha convocado el Campeonato Canario de Larga Distancia, dejando sin oportunidad a muchos triatletas que preparan estas pruebas.
A quién te gustaría agradecer todos estos años de dedicación deportiva
Por un lado, siempre que hago una prueba de este tipo y sobre todo en su preparación me gusta agradecer la comprensión de toda mi familia y entorno, en especial mi novia Conchi.
También tengo una mención especial para Kennet Gasque, como padre de la gran prueba de Lanzarote, por su apoyo todos estos años. No puedo olvidar a mi entrenador, Pablo Cabeza, que me guía desde 1999 y al que tengo que agradecer en buena medida mi longevidad deportiva.Y por supuesto a todo mi grupo de entrenamiento de dorsalcero.net y mis sponsors Ceepo y TomTom