Nueva vida y nuevos retos para Javier Gómez Noya
Javier Gómez Noya, arranca sus nuevos retos 2022 con el Mundial de IRONMAN 70.3 como objetivo
Javi dio ayer una rueda de prensa en la sede del Santander Work Café de Madrid anunciando sus nuevos retos. De momento no solo ha recuperado sus ganas de entrenar y competir sino que cuenta con un extra de motivación ante su próxima paternidad.
Javier Gómez Noya anunció su decisión de centrarse en el Mundial de IRONMAN 70.3. El gallego ha recuperado la ilusión por entrenar y competir y además recuperó a parte de su grupo de entrenamiento, y con Pablo Dapena y Vicente Hernández a su lado en Pontevedra, está remontando el vuelo.
Esto comentó “la temporada aún no está perdida”.
El parón y desaparición de las competiciones desde mayo, donde tenía programado el Mundial de IRONMAN, vino deribada del COVID y sus secuelas
«La enfermedad me dio fuerte, sufrí fatiga y dolor muscular. Después tuve una complicación que aunque fue menor, a nivel cardíaco siempre hay que tener cuidado. Estos problemas realentizaron la vuelta a la actividad y, ahora, a la vista del calendario, ir a Kona hubiera sido una lotería.
Ha sido un año complicado con muchos altibajos. El día antes de viajar a St George me puse enfermo y tuve que cancelar. Fue un COVID complicado, me dejó algunas secuelas, por eso he estado todo este tiempo sin competir y he tenido que entrenar un poco más suave durante un par de meses. Ahora, por fin, ya está todo en su sitio y estoy entrenando con mucha consistencia, mejorando mi nivel y marcándome objetivos.
Hasta ahora no podía marcarme un calendario porque no sabía cómo iba a responder mi cuerpo. Realmente fue frustrante, sí. Empecé el año ganando en Pucón en enero y tuve mucho tiempo para prepararme para el Ironman. Entrené muchísimo, hice dos concentraciones en altitud, estuve en Mallorca y ya cuando estaba haciendo la puesta a punto me puse enfermo y ese trabajo no pudo verse reflejado, eso es lo que más rabia te da. Pero así son las cosas y es hora de seguir adelante»
Kona ya no puede ser el objetivo pues la clasificación termina en apenas 15 días
“Mi objetivo era Kona pero eso está complicado sobre todo por el periodo de clasificación que finaliza en dos o tres semanas y creo que sería arriesgado competir para clasificarme, no haría la preparación adecuada y sería un poco una lotería. Luego tendría que recuperar y tampoco tendría el tiempo suficiente para Kona.
Así que pensando más con la cabeza que con el corazón, es mejor para este año centrarse en el Mundial de IRONMAN 70.3 para el que estoy clasificado y es a finales de octubre. En el mes de septiembre me gustaría correr la prueba PTO Dallas que es el 17 de septiembre, para ello me gustaría testarme previamente en una prueba que tenga nivel aunque no esté dentro de la PTO, posiblemente sea en España a finales de agosto.
El Mundial de IRONMAN 70.3 es el 27 de octubre, por lo que no descarto acabar con un IRONMAN pensando en Kona para el 2023”.
En cuanto a las PTO se siente atraido por el modelo y el trabajo que está haciendo la organización
“Están haciendo también carreras muy interesantes, es donde mejores premios hay, donde se reúnen los mejores triatletas y donde mejor tratan a los profesionales”.
Considera que la temporada aun no está perdida y que la MD tiene un nivel enorme
«La distancia 70.3 es, después de todo, una de mis especialidades, he sido dos veces campeón del mundo en medio ironman. El nivel, por supuesto, es altísimo; una prueba donde se juntan los mejores de larga y corta distancia y al final es donde más nivel hay en el mundo del triatlón. Así que mi ilusión es volverlo a ganar. Iremos a por todas y luego ya veremos dónde nos pone la clasificación a cada uno. Por ello no considero un año perdido todavía. Si gano el Mundial 70.3 habrá sido estupendo y sino habrá sido un año más malo. «
En cuanto a la corta distancia
“La distancia olímpica está aparcada, no contemplo volver. Me han pedido que compita la Gran Final de las World Series de Pontevedra 2023 en la que he ayudado a la organización, pero todavía me siento deportista y ahora lo que me motiva es la larga distancia y en eso estoy.
Cuando llevas mucho tiempo como llevaba yo en la distancia olímpica y con mucho éxito a veces es fácil llegar al portón de salida y no sentir ese gusanillo, ya parece como un día más en la oficina. Y eso creo que no es bueno. En mi caso, el paso a la larga distancia es una renovación de motivación e ilusión, de cosas que aprender y mejorar y eso me ha venido bien para mantener esas ganas porque me estoy enfrentando a algo más desconocido y más nuevo”.
Por último Gómez habló de su nuevas formas de entrenamiento
“Ha ganado más protagonismo la bici, especialmente las sesiones con la bici de contrarreloj, hago más trabajo de fuerza, cuido que el nivel de nutrición sea más eficiente, en natación he bajado un poco la intensidad y en la carrera a pie he pasado de la intensidad a más volumen para controlar la resistencia muscular después de 5 horas de competición”.
También recalcó que de momento sigue siendo deportista profesional
“Yo agradezco que me brinden trabajo desde la federación y también la internacional y, aunque me gustaría seguir ligado a este deporte, de momento sigo siendo deportista profesional”.