Las edades de iniciación al triatlon
Sonia Bejarano nos habla de como y cuando iniciarse al triatlon en categorías menores.
El triatlón es un deporte en constante evolución y relativamente nuevo. Desde que se oficializase como tal en 1978 ha sufrido variaciones como la permisión del drafting en el segmento ciclista. Esta decisión indudablemente plantea al deportista diferentes demandas físicas y por tanto, diferentes formas de entrenar, a la vez que la táctica en carrera difiere del “soloride” de antaño.
Además, hasta hace unos pocos años se echaba en falta un trabajo de base a causa de la novedad del deporte. Hasta la última década, salvo excepciones, no aparecen las primeras escuelas de triatlón para niños. Así, el triatlón de la primera era, se nutría de deportistas que venían de la natación, ciclismo y atletismo. Es hace pocos años cuando cuándo se ha empezado a formar triatletas desde el inicio, de manera, que ya no es tan necesario preguntar el deporte de procedencia de cada participante. Un hecho quizá más importante de lo que podamos imaginar.
Con todo esto, cabe pensar que la evolución del deporte en sí, haga que deban variarse constantemente las formas de entrenamiento, sin embargo, es indispensable incidir en la etapa formativa del deportista. En una escuela de triatlón, podemos hablar de una primera toma de contacto, de una etapa de iniciación desde los 8 a los 12 años donde el objetivo sea un entrenamiento mixto de todas las disciplina, enfocado a una preparación multirateral del niño y sobre todo mediante el predominio del juego. Para esta etapa no sería necesaria una periodización y deben darse importancia a ciertos aspectos como al calentamiento. 3 sesiones semanales serían suficientes para acercar el mundo del triatlón al niño. Capacidades coordinativas, ejercicios de desarrollo de equilibrio y trabajo de natación como se desarrollaría en cualquier escuela de natación.
Posteriormente, en la etapa de tecnificación, de 13 a 14 años, podríamos entrar en una especialización de ciertos aspectos como transiciones o manejo de desarrollos en la bici. Aunque el entrenamiento sea multilateral podemos entrenar de manera más condicional aspectos como la fuerza y velocidad así como desarrollo de la resistencia aeróbica. Es momento de iniciarse en la competición y puede aumentarse a 4 días por semana la práctica deportiva. Los objetivos de esta fase son; formar al deportista en las capacidades condicionales básicas y en la técnica de las disciplinas. Pueden trabajarse aspectos como la fuerza (fuerza rápida mediante balones medicinales, fuerza resistencia en circuitos o fuerza explosiva-elástica mediante saltos horizontales o gradas), velocidad de reacción/aceleración, resistencia aeróbica y técnica.
La siguiente etapa, una etapa de especialización podría subdividirse en etapa de especialización (15 y 16 años) y especialización profunda (17-19 años). En este periodo debemos tener en cuenta una progresión en la especificidad, el entrenamiento está sistematizado y el joven puede enfrentarse a 4-6 sesiones por semana. La búsqueda del perfeccionamiento técnico es una prioridad. En este momento podemos empezar a trabajar la resistencia aeróbica con sistema continuo y fraccionado así como la resistencia anaeróbica (estimulada al principio y sistematizada en la fase profunda).
A partir de los 20 años estaríamos en una etapa de alto rendimiento en la que el niño, ya convertido en adulto ha interiorizado/mecanizado cada una de las técnicas necesarias en su deporte y puede ejecutarlas dentro de diferentes escenarios de carrera a la vez que sus capacidades han sido entrenadas acorde a su crecimiento. Quizás, la objetivo prioritario sea, llevar al joven que ingresa en una escuela, hasta su etapa de madurez, pasando por toda la fase formativa (8-10 años), para posterioremente “dirigirle” hacia una etapa de rendimiento (o alto rendimiento), con sus habilidades y capacidades desarrolladas y no antes.
Escrito por: Sonia Bejarano