Joan Salom, reflexiones sobre la seguridad
Joan Salom escribe su punto de vista sobre la seguridad en los triatlones
Presidente de la Federación Catalanade Triatlón
Estimado,
Me dirijo a usted para transmitirle las sensaciones vividas últimamente en las carreras en que he participado y especialmente por el accidente ocurrido el Sailfish Half Triatlón de Berga, donde un atleta perdió la vida en el segmento de natación.
Estas líneas no pretenden culpabilizar ni juzgar ninguna persona ni dispositivo, sólo pretenden ser una reflexión en voz alta de las sensaciones vividas por un atleta en relación a su seguridad y la de los demás atletas, y el papel dela Federación Catalana de Triatlón en todo esto.
El diccionario define federación como «una agrupación de varias entidades o personas que tienen un fin común, en una superior que las representa ya la que otorgan autoridad sobre ellas». Es por ello que los atletas federados en Federación Catalana de Triatlón depositamos toda nuestra confianza en esta federación para que vele por la buena gestión de los diferentes parámetros que componen un triatlón por parte de los organizadores.
De acuerdo con el artículo 2 de los estatutos de esta misma federación en que se manifiesta que «la FCTRI tiene como finalidad básica la de ordenar, impulsar y dirigir toda la actividad del triatlón en Cataluña» no acabo de entender como se dejan al azar ciertos aspectos estrechamente vinculados a la seguridad del atleta.
Entendemos que el riesgo 0 no existe y que en toda prueba deportiva, como en muchos otros eventos con amplia participación ciudadana los factores de riesgo se multiplican exponencialmente de acuerdo con el volumen de participación y de acuerdo con las características del espacio donde tiene lugarla actividad. Es por ello que todas las partes implicadas en la organización de un gran evento de este tipo deben velar por acercarnos al famoso riesgo 0 tomando las máximas medidas de seguridad posibles. En un evento de este tipo la probabilidad de que haya un accidente casi siempre es incontrolable, pero la severidad de éste sí que en muchas ocasiones puede ser controlable. Debemos también, ser conscientes de que la fatalidad siempre se puede producir, y que por más medidas que haya a veces no hay nada que hacer, ésta, sin embargo, no puede ser la excusa para dejar ciertos aspectos al azar .
Entendemos también que según la ley, siempre, la máxima responsabilidad de un evento es de su organizador, pero cuando este evento está tutelado por la federación entiendo que esta se convierte como mínimo, moralmente corresponsable de las medidas que se puedan tomar. Es por eso que le pido por favor que dé las oportunas instrucciones para corregir y ordenar todo lo que hace referencia a los dispositivos de seguridad establecidos en las pruebas ya la forma en que todo atleta puede acceder al título de federado.
En los últimos años, desde las distintas administraciones, organismos y empresas vinculadas al mundo del deporte se ha promocionado de manera espectacular la participación en este tipo de eventos, creando la falsa sensación de que todo tipo de prueba es apto para todo el mundo . Desde esta federación se da cobertura federativa a todo deportista sin ni siquiera pedirle un pequeño certificado médico o prueba de esfuerzo. Ya entiendo que en este aspecto todos tenemos parte de responsabilidad ya que debería ser el propio atleta que velara para su seguridad, pero muchas veces esto no es así, y sería necesario que desde la propia federación se facilitara el acceso a la realización de pruebas de este tipo a precios accesibles mediante acuerdos con centros médicos y se en pidiera un certificado antes de federar a nadie. Tampoco acabo de entender como cualquier atleta puede acceder a una inscripción de una determinada prueba con una licencia federativa de día y tampoco pedirle ningún tipo de certificado médico. ¿Qué garantías hay de que este atleta tenga una buena salud y entrene regularmente para afrontar en condiciones este tipo de prueba?
Una de las premisas importantes en el diseño y la planificación de grandes eventos, es que todo el operativo de emergencia esté perfectamente identificado y visible para el usuario, para que la gente pueda identificar perfectamente dónde están y cómo localizarlos. Yo, como usuario de las distintas pruebas no tengo esa sensación, ya que en muchas de las pruebas ni siquiera los veo, esto no quiere decir que no estén, pero todo atleta y todo espectador debería poder identificar rápidamente en todo momento donde dirigirse en caso de que sufra cualquier anomalía.
También considero que el diseño de los preventivos sanitarios seguramente cumplen con la normativas vigentes, pero en ningún caso están pensados y dimensionados específicamente en función de las características de cada prueba. El artículo 8 del reglamento de organizadores de esta federación dice que «el organizador dispondrá de los recursos de seguridad y emergencias necesarios que así determinen las administraciones que han concedido la autorización para el uso de los diferentes espacios públicos (mar, playas , puertos, carreteras, calles, senderos ….) «no entiendo como desde la federación se deja en manos de las distintas administraciones, que en muchos casos tienen unas estructuras en cuanto a protección civil, policía, etc. muy escasas y que a menudo desconocen los riesgos de este deporte, y a los organizadores, el diseño de todas las medidas de seguridad de una prueba. Como mínimo la federación no debería formar parte de este equipo encargado de todos estos aspectos? No tiene nada que decir?
El artículo 8.2 habla de que «en todos los casos en el segmento de natación será necesario, como mínimo, una embarcación con capacidad de efectuar un posible rescate y de otra embarcación de alerta y control. Es necesario que una embarcación haga de vehículo escoba y que en tierra exista un equipo sanitario para evaluar y atender a los evacuados. La falta de este recurso conlleva la anulación de la prueba «. ¿Esta embarcación que tiene que hacer un hipotético rescate no debería ser una embarcación sanitaria? ¿No debería ir equipada e identificada como tal? ¿Sirve cualquier embarcación? ¿Cuál es el personal sanitario que tiene que ir? Un enfermero? El médico? Un asistente?
El artículo 8.3 dice que «habrá que disponer además de lo anterior y como mínimo de un médico y dos ambulancias con los respectivos equipos«. Todos somos conocedores que en muchas de las pruebas, sobre todo de montaña en que una gran parte del recorrido transcurre en senderos el acceso con ambulancia no es factible. ¿En caso de accidente como accede el personal sanitario al afectado? Es más, incluso como se enteran de que ha habido un accidente? ¿Hay que esperar que otros atletas avisen? ¿Quien hace la primera atención al accidentado? ¿También de otros atletas? No se debería pedir que al menos hubiera ciertos equipos sanitarios de primeros auxilios (EPA’s) repartidos a lo largo del recorrido en función de las características de este? Durante el transcurso de las pruebas, nos avanzan a menudo motos con jueces o fotógrafos, no debería haber quizá también algún vehículo sanitario que recorra los distintos tramos de la prueba? ¿El atleta no se debería cruzar en ciertas ocasiones con dispositivos sanitarios durante una prueba?
Entiendo que todo esto supone un sobrecoste al organizador de una prueba que ya trabaja con unos márgenes de beneficio suficientemente ajustados, pero también pienso que si desde la propia federación se gestionaran las medidas de seguridad mínimas aplicables a cada prueba, no únicamente con el fin de cumplir con los distintos reglamentos y normativas oficiales aplicables, sino para garantizar la máxima seguridad del atleta en función de las características de la prueba y del volumen de inscripciones, se podrían llegar a acuerdos con las disintas empresas especializadas en atenciones sanitarios de urgencia en referencia a los precios de los distintos servicios. Todos sabemos que no tiene el mismo coste contratar un servicio que contratar diez.
Soy consciente de que esta no es una problemática única y exclusivamente del triatlón, pasa lo mismo en las carreras de atletismo, en las salidas de BTT, etc. Pero quizás es necesario que entre todos nos detengamos un instante y reflexionemos sobre lo que está pasando a nuestro alrededor; muchas veces la inercia de hacer siempre algo de una determinada manera no nos deja ver si lo que estamos haciendo es correcto o no.
Desde la percepción de un atleta, y con el desconocimiento del día a día de la federación, entiendo que estas son los aspectos en que debe trabajar la federación, no sólo en controlar si el «acople» sobrepasa el manillar de la bici, si llevamos el dorsal detrás o delante o si nos desabrochó el casco dentro o fuera de los boxes. Todos estos temas son mucho más importantes que todo esto, pero últimamente parece que han quedado en el olvido.
Espero que entre todos, podamos seguir disfrutando de este maravilloso deporte y no dejamos que para mirar hacia otro lado en determinados aspectos pensando que esto o aquello no va con nosotros, veamos como el triatlón en Cataluña acaba muriendo de éxito .
Muchas gracias para su atención.
Atentamente,
Juan Salom y Moreno